CANTO AL EXILIO
Pedro Piñones Díaz
Talaron el monte, no así las raíces
las raíces tienen paciencia,
las raíces son sufridas,
las raíces saben que no hay maquinas
que puedan impedir la primavera.
Y no son los pájaros
los que hacen la primavera,
es la primavera
la que hace los pájaros.
En el monte se trabaja en equipo,
las hormiguitas, las cigarras, los pájaros
todos trabajan contra la serpiente.
Aunque el invierno sea largo
el monte no se olvida de todo eso,
que seria olvidarse de si mismo,
y como el hombre primitivo
hacia con el fuego,
los hombres nos vamos pasando
de mano en mano
la memoria como una arma
y es el pueblo el que decide
quien cabe o no cabe en su memoria.
Cuando se canta al exilio
se canta a lo que se pierde
también se canta a los que otros han perdido,
aunque dolorosa no es el centro
del dolor del mundo:
en el destierro hemos tenido que tratar
de no volvernos rehenes de la tristeza
y de trabajar por mis hermanos
que en Chile
son rehenes de la dictadura.
dimanche 7 mars 2010
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